“Anhelo que
en el futuro como deportistas judíos nos animemos aún más a hablar abiertamente y a sentirnos orgullosos.”
Ya de niña, Sarah Poewe, nacida en Sudáfrica, participó de competencias de natación, y en el año 2000 representó a ese país en los Juegos Olímpicos de Sídney. En 2002 compitió por primera vez para Alemania de manera oficial. La disciplina de Sarah Poewe es el estilo pecho, 17 veces se consagró campeona alemana y estableció numerosos récords. En 2004, en Atenas, logró un hito histórico: la medalla de bronce que obtuvo en los relevos de 4 x 100 metros fue la primera medalla olímpica para una atleta judeo-alemana después de la Segunda Guerra Mundial.
En el año 2015, por primera vez se llevaron a cabo en Alemania los Juegos Macabeos Europeos, los “Juegos Olímpicos judíos”. Las pruebas se realizaron en el Estadio Olímpico de Berlín, donde Adolf Hitler había inaugurado los Juegos Olímpicos en el año 1936. Para muchas personas de la comunidad judía era casi impensable que precisamente ese fuera el lugar que albergara a los Juegos Olímpicos judíos.
Sin embargo, un gran número de judías y judíos alemanes estaba convencido: Con esta decisión demostramos autoestima y compromiso con nuestro país y con nuestra identidad. De ese modo, la Macabeada en ese sitio histórico se convirtió en un símbolo de reconciliación y entendimiento.
